En estas estoy a vueltas con las salidas traileras, solitarias y en silencio, buscando la soledad y acomodando a ella la cabeza, esa que en las carreras de esta temporada será mi única compañera, aliada y enemiga pero cuando sienta que la he domesticado este lobo solitario irá nuevamente en busca de la manada, pero ahora toca soledad y esfuerzo.
Para la realización de esta pretemporada me he buscado dos gimnasios y un banco de pruebas, uno e los gimnasios es el típico con sus aparatos, pesas y demás instrumentos "fortalecedores", la novedad es que voy con regularidad y además estoy prestado atención a la parte superior del cuerpo.
El otro gimnasio es, para mi, mucho mas agradable y es la Sierra de Hoyo, la considero gimnasio porque es un terreno que te deja forzar casi sin darte cuenta, pero te va agarrando las patas y exprimiendo todo lo que llevas dentro.
EL banco de pruebas es nuestro querido Cerro y este fin de semana he realizado un primer control del sistema y he terminado muy satisfecho completando una sesión que hace un tiempo sería impensable para mi.
Saliendo desde casa he ido en busca del cortafuegos para subirlo en su totalidad y salvo unos pequeños metros mas técnicos y de piedra suelta llegando corriendo hasta arriba en 58 minutos para 6,4 kilómetros en total, luego bajada por el cortafuegos que da al Moral hasta la senda de los cazadores y desde allí bajar por el Peñón para enlazar con la segunda subida del día al depósito antiguo, bajar por el valle y buscar la tercera subida por la cuesta gris y desde su final alcanzar nuevamente el cortafuegos para volver hacia casa.
Al final una sesión de 16,5 km con un desnivel acumulado de 1.360 metros de los cuales +680. en 2:30
Con un ritmo "tractoril" pero sin parar y "andando" solamente en los puntos en los que casi hay que trepar, se que algún metro mas corriendo podré sacar pero por ahora me conformo con esta situación.